Chispa Florida fortalece el poder de las comunidades de bajos ingresos, Latinx y otras comunidades BIPOC en toda la Florida para lograr la justicia climática, la salud de la comunidad y la protección del medio ambiente y exigir la rendición de cuentas de los contaminadores y los responsables de la toma de decisiones. Nuestros esfuerzos de organización comunitaria y compromiso civil vigorizan el movimiento ambiental con nuevos líderes, aumentan la participación de los votantes y responsabilizan a los funcionarios electos durante todo el año.

Los efectos nocivos del cambio climático nunca han sido más alarmantes: desde el desplazamiento de millones de personas debido a condiciones meteorológicas extremas, la exacerbación de la contaminación atmosférica por el calor extremo más fuerte y prolongado, la falta de acceso al agua potable, los incendios forestales masivos, la destrucción de la vida silvestre y la creciente contaminación de nuestra tierra y agua.

Las comunidades de Latinas, que ya son el grupo demográfico minoritario más grande de la Florida, se encuentran entre las más afectadas y las menos involucradas en las organizaciones ambientales principales, pero son unas de las más comprometidas en el apoyo de una fuerte acción gubernamental para frenar la contaminación y enfrentar el cambio climático de forma directa. Para fomentar un movimiento estatal y nacional para abordar el cambio climático, las comunidades y los líderes Latinxs y BIPOC deben ser vistos y escuchados por los responsables de la toma de decisiones como los líderes que son en materia de cuestiones ambientales.

A través de la organización comunitaria de base, las campañas temáticas y la participación civil, Chispa está creando victorias locales, lideradas por las familias Latinas y BIPOC, que cuando se conectan crean el impulso para una fuerte acción local, estatal y nacional sobre el cambio climático. Al mismo tiempo, estamos aumentando la infraestructura y el liderazgo en las comunidades para apoyar a las familias Latinas y BIPOC que tienen la influencia política para hacer frente a los contaminadores y exigir la rendición de cuentas de los responsables de la toma de decisiones que se han hecho de la vista gorda ante el racismo y las irregularidades ambientales en sus comunidades. Este liderazgo es esencial no sólo para las comunidades locales, sino también para asegurar que las principales organizaciones ambientales integren la justicia y la equidad en sus prioridades y análisis, y se conviertan en organizaciones inclusivas y más diversas desde el punto de vista racial que reflejen y representen mejor a todas las comunidades de la Florida. Este es un paso crítico mientras nuestro país se prepara para que en el 2045 la mayoría de su población, sean personas de color.